lunes, 12 de septiembre de 2016

La ilusión se quedó sin alas..

Arráncame de mi tallo 
decía una rosa a un picaflor 
no puedo seguir viviendo 
si hieres mi corazón .. 
El picaflor se había acercado 
atraído por la suavidad y el color
pero prefería admirar su hermosura
a dañarle su esplendor.
El tallo sobre la rama
de pronto se balanceó
la rosa buscaba atraerle
con sutíl movimiento sus pétalos abrió .
El pequeño pajarillo no lo pudo resistir
voló por lo alto hipnotizado
el corazón rojo encendido
de la rosa descubrió .
Arráncame de mi tallo
La rosa le dijo al picaflor
¿A que no te animas ?
susurrando le desafió.
Él haciendo caso omiso
para no tentar su agudo pico
y escapar de su seducción
aleteaba sobre una hoja iluminada por el sol .
Después quiso alejarse
en un vuelo imperceptible
sus alas fueron caricias
sobre el tallo de la flor .
La rosa le habló a la brisa
que un favor le concedió
la brisa fresca de mayo
el verde tallo arqueó .
Aquella tarde de otoño ´
perdió sus pétalos la rosa
con el golpe del cuerpito
del hermoso picaflor .
Herido estaba de muerte
por las espinas, cual dagas
que entre las hojas lustrosas
clavaron su corazón .
Un arcoíris de plumas suavecitas
se quedaron como ofrenda
envolviendo con tibieza
el tallo que perdió la flor .
Los pétalos cayeron uno a uno
arropando de ternura
el cuerpo inerte que yacía
del pequeño picaflor.
Dos vidas quedaron truncas
a la caída del sol
la ilusión se quedó sin alas
y un perfume de rosas la tarde inundó.
Nery Guerra Alvarez
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