Escribo mis letras de conciencia y rebeldía
teas ardientes que alumbran y muestran
la realidad del mundo inhóspito y sin consideración
donde la inocencia es flor, que se deshoja día a día.
Los niños y niñas errantes deambulan por la indigencia
huyendo de los horrores de la guerra, de la explotación
pies descalzos , pelitos de alambre , caritas sucias, ropas raídas
prominentes pancitas , clara evidencia de la desnutrición .
Escribo mis letras de impotencia y son grito de Vida
por los niños y niñas que necesitan refugio, y buscan pan
la desidia los ha condenado a un presente de incertezas
donde se vulneran todos sus derechos y se coarta su libertad.
El futuro es la mirada en perspectiva hacia ese tiempo que llegará
pero la vida y la integridad de los niños y niñas no se puede dilatar
es urgente y necesario que en un breve lapso
sea posible lograr un consenso a nivel mundial.
Desandar los caminos de la guerra , la intolerancia , la violencia
que cada niño y niña tenga asegurado su derecho a vivir en Paz .
A vivir en un entorno seguro donde sean realmente protegidos
contemplando sus derechos a la salud y educación
el derecho a una familia que los ame, los contenga
a desarrollarse en un ambiente sano, también a la recreación.
Escribo mis letras de conciencia y rebeldía
por los niños y niñas del mundo entero
para los que le han robado la sonrisa y la alegría
cargando sobre sus tiernas espaldas una pesada cruz.
Y son mis letras , letras que duelen
espinas de rosas clavadas en el corazón
versos rebeldes que gritan en silencio
palabras que impulsan al compromiso y la acción.
Los niños vinieron al mundo para ser felices
somos los adultos los que tenemos la ardua tarea
de asegurar y defender sus derechos en el día a día
no siendo indiferentes ante su indefensión .
También son mis letras de conciencia y de esperanza
en que podemos construir un mundo más justo y mejor
donde niños y niñas gocen plenamente de una vida digna .
Involucrarnos en esta problemática es la forma de hacer oír su Voz.
Nery Guerra Alvarez
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