Me quedé en la sombra de las paredes
revestidas de un blanco puro
donde se perdió mi canto de alegría
se quebró en llanto mi voz.
Me quedé en el brillo de los vidrios
de las ventanas que se cerraron
las flores de colores estaban fuera
se perdieron el perfume de mis manos.
Soslayé de reojo el verde de los árboles
no podía sentir el canto de los pájaros
me cubrió la soledad de la intemperie
el frío se adueño de mis encantos
la seda de mi piel se volvió áspera
la sonrisa solo estaba en un retrato .
Me sorprendió la primavera
en aquel invierno inacabado
de silencios elocuentes ´, de gritos airados
se quebraron las ilusiones con cada golpe
pequeños trozos de vidrio templado .
Me quedé inmóvil , rota , circunfleja
quebrada mi dignidad y mi esperanza ´
entre las blancas paredes se perdió mi orgullo
me sentí atrapada casi sin salida
no podía ver más que mi sombra
diluída en otra sombra que me devoraba
que no se saciaba ni con mi sangre
se abatían así , con dolor mis alas.
Me quedé en el silencio de la ausencia
quedando mi sentir anestesiado
me transformé casi en invisible
sobrevivir se convirtió en un milagro .
Se me condenó a sufrir por amar
aceptando culpas que me laceraron
flores púrpuras se atrevieron a florecer
sobre la tersura que se perdió en los años.
La piel rosa se fue marchitando
en el desierto de los desengaños
me quedé así , rodeada de altas paredes
todas pintadas de un purísimo blanco.
En la inmesidad del cielo se perdió mi cordura
que voló adosada a las alas de mi ángel
en el gran vacío me sentí perdida
sin brújula mi vida , después del naufragio .
Pasaron días que aún no recuerdo
recordar me supone un gran esfuerzo
por eso miro el sol que aún está ,algo lejos
y renuevo el intento de seguir a diario.
Cual junco mi cuerpo sigue resistiendo
a los fuertes vientos que quieren derribarlo
no me resigno a quedarme inmóvil
mi niña llora en este mismo instante
es solo por ella que hoy me levanto.
La miro indefensa y tan vulnerable
no quiero que sufra ningún infortunio
ni se quede triste en un rincón
no quiero que cargue con ninguna cruz
no es justo que pague por culpas ajenas
transformándose en sombra su inocente luz .
Entonces me digo que ahora es la hora
de abrir las ventanas que están todavía cerradas
descorrer los miedos que me acompañaron
dejar que entre aire ,que entre el sol
tomar en mis brazos a mi niña amada
buscar la salida a esta situación .
Por ella voy a atreverme a caminar de nuevo
armarme de a poco , escuchar mi propia voz
olvidar el tiempo en que no sentí estar viva
Dejar de ser sombra , volver a ser Yo.
Nery Guerra Alvarez
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